3 de agosto de 2013

JAMÓN JAMÓN










Después del show de Sotavento Big Band teníamos que comer.  Por supuesto que ya habíamos pensado en esto y nos habíamos decidido por el lugar. Debe ser algo de familia, pero a los dos se nos había antojado lo mismo: cocina ibérica. A mi se me había ocurrido ir al Casal de Catalunya, por mi nostalgia crónica e interminable por mi querida Barcelona pero papá me propuso el Museo del Jamón, y como tampoco había ido nunca, acepté. Además el invitaba…
El lugar es bien español y tiene tantos mozos como mesas. La atención es excelente. Siempre están muy pendientes.
Como era de esperarse, había muchísimos jamones colgados a la vista y un mostrador-vitrina-refrigerador con distintos jamones, quesos y embutidos para llevar. Era viernes, estaba cansada y con una gripe que apenas me dejaba sostener la cámara. Lo único que quería era comer e irme a dormir, asique les debo la info de variedades y precios.
Puedo decir que al ser solo dos, fuimos un poco más medidos pero, lo que sí estuvo de más, fue una copa de vino tinto (habíamos pedido dos) y con un solo postre hubiéramos estado más que satisfechos.
Estos fueron nuestros elegidos de la carta:
Tapas calientes para dos: pulpo, mejillones, cordero, rabas y me falta una que no recuerdo.
Pedimos un solo plato principal para compartir: costillitas de cordero encebolladas con terrina de papas y espinacas.
De postre papá pidió una natilla que estaba bien pero para mí, la natilla es como un postrecito de vainilla del super al lado de una Crème Brûlée.
Yo pedí un Tiramisú que estaba bien también, suave y generoso.
Igualmente, aunque todo me pareció fresco y bien hecho, lo que más me gustó fue el pan. No soy de comer con pan, solo cuando voy a comer afuera quizás algún pancito con manteca mientras espero. Y esta vez, al probar ese pancito, no pude parar, y no solo yo, papá me imitó y en contra de todas las reglas de protocolo, le pasamos el pan a los platitos de las tapas y al del plato principal con un desparpajo absoluto. Bueno, un poquito de vergüenza nos dio, pero no nos importó.
Dato: Es caro pero al menos tiene %20 de descuento con Club La Nación.

31 de julio de 2013

EL EMPLEO DEL TIEMPO










1 Arrancando ahora
2 Es hora de probar una nueva granola
3 Showtime!
4 Lunchtime Break
5 La extraño a toda hora
6 Fotear a cualquier hora
7 La hora mágica desde el ala norte de mi oficina
8 Hora de volver
9 Bedtime para Matilda