2 de julio de 2015

29 de junio de 2015

BIZCOCHUELO INTEGRAL









Los días lluviosos piden torta o cualquier cosa rica para la hora del té.
Hace mucho que no hacía una torta y como no teníamos ningún plan, no iba a hacer nada demasiado elaborado. Así que simplemente decidí probar una nueva receta de bizcochuelo.
Mientras lo estaba preparando, Fede me dijo que nos habían invitado al cumpleaños de un año, del hijo de un amigo al que no veía hace mucho, y con el que se debían una reunión y por supuesto, una zapada. A pesar de ser un domingo gris, nos surgieron ganas de salir a encarar el afuera, además de que para mí, era la excusa perfecta para compartir la torta y así no correr el riesgo de que se desperdicie, y se quede en casa secándose toda la semana.
Buena decisión haber salido, no solo porque Fede pudo ver a su amigo, porque la pasamos muy bien charlando y compartiendo anécdotas, sino porque también se dieron el gusto de tocar, prestarse instrumentos y yo pude sacarles fotos y escuchar. Y sí, cuando vivís con un músico, un simple cumpleaños infantil, se convierte en un recital de rock.
El bizcochuelo? Bueno, había tantas tortas en la heladera de esa casa, además de toda la comida que había sobrado del cumple, que me agradecieron por haberla llevado pero también me agradecieron por traérmela devuelta.
Así que con torta pero sin guitarra (Fede se la olvidó), dimos por terminado el fin de semana.
Y qué bueno que me la traje, es tan rica que me estoy comiendo una generosa porción mientras escribo este post.
Háganla, es suave, aireada, liviana, fácil y rápida. Qué más? Ah sí, sanísima, porque usé todos productos integrales y orgánicos.
Les recuerdo que estoy en Instagram: julia.menendez

Va la receta: 
Ingredientes
4 huevos
140 grs de azúcar orgánica
2 cucharadas de aceite de girasol
1 cucharadita de vainilla
7 cucharadas de harina integral orgánica
2 cucharadas de polvo de hornear
Preparación
Entibiar los huevos con el azúcar y batir hasta lograr una preparación bien espumosa. Incorporar el aceite y unir. Perfumar con la vainilla.
Tamizar la harina, el polvo de hornear y agregar a la otra mezcla, suavemente y con movimientos envolventes para mantener la espuma.
Colocar en un molde de 22 cm de diámetro (yo usé uno redondo pero pueden usar cualquier otro de tamaño similar). El bizcochuelo crece pero es una torta chica, no es muy alto por lo cual se puede usar un molde de altura mediana.
Forrar el molde con papel manteca, enmantecado. Precalentar el horno y cocinar a temperatura suave durante 45 minutos aproximadamente. Enfriar y desmoldar.